
DIA INTERNACIONAL DE PERSONAS CON DISCAPACIDAD
Sr. Director, con el ruego de su publicación, en EL FARO.
Hoy es el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, con tal motivo, le remito el siguiente poema dedicado con cariño a todas las madres de personas con discapacidad.
A QUIEN MIRA MIS OJOS
Yo quiero gritarle al viento
palabras que lleguen lejos,
y lleve mi agradecimiento
a quien quita mis complejos.
A quien dedica su tiempo,
a quien me tiende su mano,
y el aroma de su aliento
con su trato tan humano.
A quien me mira a los ojos
siendo discapacitado,
y ve un corazón que late
deseando ser amado.
Yo no soy tan diferente
por el hecho de ir sentado,
yo también amo a la gente
que me cuenta su pasado.
Y si ves que no te escucho
no creas que no te amo,
será que me venció el sueño
y contigo estoy soñando.
Yo quiero darte las gracias
con todo mi corazón,
por empujar de mi silla
y regalarme tu amor.
ANTONIA NAVARRETE LEBRATO – DICIEMBRE 2014 –
Gracias amigos por publicar mi poema. Ellos son como yo, y yo como ellos todos somos iguales ante los ojos de dios. Ellos aman y quieren ser amados como cualquier ser humano. Madre coraje que estas siempre a su lado, bendita tu sangre y tu esfuerzo sagrado. Hoy para ti mis versos llenos de cariño.
SANGRE DE MIS VENAS
Ven a mis brazos,
sangre de mis venas,
tuyos son mis besos,
mía tu condena.
Tuyos son mis ojos,
el aire que me alimenta,
y aquella estrella que brilla
para ti la traigo envuelta.
Y aquel cometa que vuela
dando por el cielo vueltas,
para hacer que tú sonrías
haciendo alegres piruetas.
Ven a mis brazos,
sangre de mis venas,
tuyos son mis besos,
mía tu condena.
Yo seré tus piernas
y nada te ha de faltar,
iré quitando las piedras
que encuentre en tu caminar.
Tú eres mi sol y mi sombra,
yo, el aura que te protege
de este mundo con barreras
y que nadie se merece.
CON CARIÑO A LAS MADRES CORAJES QUE LUCHAN
POR SUS HIJOS
ANTONIA NAVARRETE LEBRATO DICIEMBRE 2011.
MUJER DE BELLA SONRISA
Mujer de bella sonrisa
y aroma sabor a miel,
para ti son mis palabras
que ganaste sin querer.
Cada vez que te levantas
ya empieza el amanecer,
y con tus manos empapas
lo que tienes que atender.
Eres mujer de batallas
amantas una y otra vez,
y no te importan las horas
que abrazas a tu bebé.
Tú trabajas dentro y fuera,
tu hermosura dejas ver,
y aunque con pena en el alma
a nadie se lo haces ver.
Eres sol de primavera
tu belleza es eminente,
pus a ti jamás te alteran
nubes negras de poniente.
¡Ni la lluvia del otoño!
ni la luna fluorescente,
te vencen nunca tu sueño
si nadas contra corriente.
CON CARIÑO A LAS GRANDES MUJERES QUE LUCHAN POR LAS FLORES DE SU VERGEL.
ANTONIA NAVARRETE LEBRATO MARZO 2013