Julio Rodríguez/Opinión.-
SOBRE MOTRIL, 2025. MEJORA LA ECONOMIA Y SE ANUNCIAN POSIBLES BURBUJAS

El verano de Motril parece encontrar su punto de auge con la festividad de la patrona, la Virgen de la Cabeza. Es un buen momento para comentar algún aspecto de la vida de esta ciudad. Viviendo fuera de Motril hay que recurrir a la información estadística disponible. Los datos publicados revelan que en 2025 persiste la mejoría apuntada en los dos años precedentes, aunque está por ver las consecuencias de los cambios que vienen advirtiéndose en la ciudad. En materia económica Motril sigue la evolución general de España, cuyo mayor crecimiento respecto sobre la Unión Europea está ligado al turismo, a una nueva recuperación de la construcción de nuevas viviendas y a una fuerte inmigración. La población de España ascendió a más de 49 millones de habitantes en el primer trimestre de 2025, evolución acompañada de un fuerte aumento del número de hogares. Esto último ha impulsado la demanda de vivienda y ha provocado elevaciones importantes en los precios de las viviendas y en los alquileres, complicando el acceso sobre todo a los jóvenes hogares.

En cuanto a los datos de Motril, empezando por los relativos a la población, el padrón municipal de 2024 reveló la presencia de 59.867 habitantes, población próxima a la existente cuando en 2010 se materializó la segregación del hasta entonces anejo de Torrenueva-Costa (Gráfico 1). La proporción de población extranjera ascendió en ese año al 11,0 % del conjunto de la población, una proporción inferior a la media de España (13,9%). El aumento de la población de Motril en 2024, el 1,18%, fue el más elevado desde 2010. En lo que va de siglo, esto es, entre 2000 y 2024 la población de Motril ha crecido en 9.460 habitantes, casi un 19%.
Está próxima la segregación de los hasta ahora anejos de Carchuna y Calahonda, lo que supondrá la reducción de la población de Motril en unos 4.000 habitantes, pues a esos dos anejos habrá que añadir la población de las urbanizaciones de La Chucha y de La Perla de Andalucía, situadas en el llano de Carchuna. Se reducirá también de forma sustancial la superficie del término municipal de Motril y ello en una proporción muy superior a lo que supuso en su día la segregación de Torrenueva-Costa. La segregación de los tres anejos hasta aquí mencionados (Torrenueva, Carchuna y Calahonda) no va a ser un hito positivo en la evolución histórica de Motril, que tanto luchó en los años cincuenta del siglo pasado para conseguir que el agua llegase al hasta entonces desolado llano de Carchuna. En el hasta ahora anejo de Carchuna tiene la sede una de las más importantes cooperativas agrícolas de Andalucía.

Los datos relativos al mercado de trabajo en Motril en 2025 presentan un perfil positivo. Como se preveía en un trabajo publicado en El Faro hace ahora un año, al final de 2024 el total de afiliados a la Seguridad Social superó los 20.000, ascendiendo a 20.300. Dicha evolución implicó un aumento del 3,2% sobre el año anterior, superior al de España en el mismo ejercicio anual. Dicho incremento tuvo lugar a pesar de la reducción de los afiliados al Régimen Especial Agrario en 2024. La evolución positiva del empleo ha continuado en 2025, en cuyo mes de junio el número de afiliados había ascendido hasta 20.447, lo que implicó un aumento del 3,3%, superior al del conjunto de España (1,6%) (Gráfico 2). El número de parados registrados en Motril ha descendido en 2024 y primer semestre de 2025, situándose por debajo de los 4.000 en junio de este año. La tasa de desempleo de Motril se ha situado en el 16,2% de los activos. Dicha proporción, aunque más elevada que la media de España (11,7%), es inferior a la correspondiente a la media de la provincia de Granada (17,2%).
En cuanto al mercado de la vivienda, destaca la recuperación de las ventas de viviendas en Motril en los últimos años. Tras los importantes descensos registrados entre 2008 y 2013, dichas ventas han crecido con fuerza en 2023 y 2024, bordeando en ambos años un total anual de mil viviendas, crecimiento que se ha acentuado en el primer trimestre de 2025 (Gráfico 3). Los precios de los alquileres han subido también en Motril. Según la estadística del Ministerio de Vivienda en 2023 el alquiler medio de una vivienda en Motril ascendía a 449 euros /mes, cifra que ha debido de crecer bastante en los dos años posteriores. En Motril abundan las habitaciones alquiladas, lo que revela escasez de viviendas destinadas al alquiler permanente. En esta ciudad hay 330 viviendas turísticas, según el INE, que reducen la oferta de viviendas de alquiler permanente. Teniendo en cuenta la competencia del municipio en cuanto a viviendas turísticas el ayuntamiento motrileño debería regular la creación de este tipo de viviendas, que afectan de forma significativa a la calidad de vida de las zonas en las que se establecen. También debería procurarse que sea una realidad la construcción de nuevas viviendas protegidas de precios realmente asequibles
La política urbanística del ayuntamiento de Motril tiene la mayor de las empatías con el desarrollo inmobiliario y todas las antipatías posibles respecto del desarrollo de actividades productivas alternativas a dicho desarrollo inmobiliario, sobre todo si ocupan suelo. Cuando “pinchó” la burbuja inmobiliaria en el verano de 2008 el número de parados creció de forma espectacular en Motril, a los que el ayuntamiento apoyó ante la falta de empleos alternativos, como por entonces declaró al diario Ideal el alcalde Carlos Rojas. “La burbuja inmobiliaria no fue buena para casi nadie. Después de urbanizar todo lo urbanizable y de construir como si no hubiese un mañana los precios de vivienda y suelo crecieron en un 250% y en un 400%, respectivamente. Construir sin limite implica estar desconectado de la realidad. La ciudad debe de centrarse en las necesidades de los que viven en la misma con vocación de permanencia, sobre todo no debe de ser una ciudad que expulsa a su población ni estar al servicio de los que pasan por ella” (Javier Burón, “El problema de la vivienda. Como desactivar la bomba de relojería que amenaza con colapsar España”, 2025, Arpa & Al Editores). Algunas de las operaciones que ahora se preconizan como precursoras del “Motril del futuro” pueden ser rentables para los que las promuevan, pero afectarán de forma negativa a la calidad de vida del pueblo, saturaran el espacio próximo al Paseo Marítimo y está por ver si hay demanda para tanta vivienda secundaria. No parece que en Motril exista una necesidad tan grande de amarres de barcos como para que dicha teórica necesidad sirva de justificación para operaciones inmobiliarias de la dimensión que se anuncian.





